¿Cuántas veces escaneaste un QR que te llevó a una historia de Instagram, que a su vez tenía un enlace mediante el cual accediste a Tiktok?; ¿Cuántas veces leíste una nota en una publicación y la continuaste en un reel?; ¿Cuántas veces miraste una saga de ciencia ficción en la TV y continuaste leyendo los libros y siguiendo los vivos de Instagram de la autora?
Si tu respuesta a alguno de estos interrogantes fue que al menos una vez te has encontrado en esas situaciones o similares, significa que has participado en una o varias historias basadas en la Narrativa Transmedia.
Pero, ¿qué es la Narrativa Transmedia? Tal como lo explica Henry Jenkins en su libro Convergence Culture, la Narrativa Transmedia, es una manera de contar historias a través de múltiples medios, plataformas y formatos.
En un mundo lleno de nuevas tecnologías se premia el contar historias mediante la combinación de estas nuevas herramientas digitales en conjunto con las analógicas. El valor aquí reside no solo en la capacidad y creatividad de los creadores para que, en base a su idea logren coordinar y explotar su relato en distintas plataformas motivando a sus públicos y generando que estos difundan esas historias, sino también en la posibilidad de darle voz y voto a ese público.
¿Qué son los prosumidores?
Hablamos de prosumidores porque el consumidor no es un sujeto pasivo que se encuentra detrás de la pantalla en una relación unidireccional, limitándose a solo consumir, sino que también es productor de contenido. Es decir, la Narrativa Transmedia permite conocer al público que queremos llegar, saber de sus intereses, gustos, preferencias, opiniones, etc. Y en base a esa información crear y contar nuevas e interesantes historias.

Es fundamental usar la cultura popular como herramienta para pensar y analizar que es lo que el público quiere y/o necesita ver, leer o escuchar. Para ello es necesario estar al día con los trendings topics, ejercitar las habilidades blandas como la escucha activa y lograr generar contenido de valor para nuestra audiencia explotándolo en todos los canales que sean posibles.
Vemos así como la transmedia viene a ser una nueva manera de relatar historias por medio de múltiples plataformas dando la oportunidad al receptor de tener un rol activo. Las marcas deben poner en práctica esta forma de contar historias ya que se enfrentan a una audiencia multiplataforma en un mundo caracterizado por la diversificación y fragmentación de medios con contenidos fugaces.
De esta manera, la transmedia aplicada y ejecutada correctamente puede convertirse en una de las claves del éxito para la comunicación de las empresas.
Tal como expresó Seth Godin: “El marketing ya no se trata de cosas que vendes sino de las historias que cuentas”. La transmedia ha generado disrupción en un escenario, abriendo las puertas a un mundo ya conocido pero que gracias a la existencia de nuevas y muy variadas plataformas y medios ha permitido conectar con los públicos y lograr captar su atención en un mercado donde la competencia es cada vez mayor.
En el mundo tan flexible y mutante donde, tal como sostiene el sociólogo polaco-británico Zygmunt Bauman, la cultura moderna se constituye en un estado permanente de devenir que nunca pierde ímpetu, el cambio y la transitoriedad ganan terreno, transformando constantemente las formas de captar la atención, atraer audiencias, formar comunidades y crear sentido de pertenencia.
